Sonia dijo a Radio Mundo Real este martes, mientras se espera el dictamen judicial que la tiene como acusada, que desde el año 2005 la comunidad ha enfrentado amenazas y procesos jurídicos de una de las más poderosas empresas constructoras del país centroamericano.

Tres de sus compañeros de lucha fueron demandados aunque felizmente fueron absueltos, aunque ahora la empresa ha vuelto a presentar demanda contra Sonia por delitos de difamación.

Ella es clara: se trata de destruir uno de los últimos pulmones verdes del área metropolitana salvadoreña contra la voluntad de sus pobladores y ante ello existe el derecho de resistencia. No obstante, durante el proceso judicial a Sánchez se le han violado sus derechos humanos debido a la aplicación de medidas cautelares como al libre tránsito y la distracción.

Sonia agradeció las muestras de solidaridad hacia ella emanadas de distintas organizaciones ambientalistas y de derechos comunitarios en Centro y Sudamérica.

El objetivo claro de la empresa es callar a la población, ya que están solicitando ampliar el proyecto a 110 viviendas más, no obstante, la comunidad bajo el liderazgo de Sánchez continúan fortaleciendo el trabajo, “seguimos luchando y no permitiremos que nos callen y nos detengan”, dice la ecologista y feminista salvadoreña.

“Realmente agradecer las muestras de solidaridad a las personas, organizaciones de derechos humanos, ambientales que han dado muestras de solidaridad en nuestro caso. Insisto en que nos mantengamos unidos para defender los derechos humanos y ambientales, así como los derechos de la Madre Tierra. Si no la defendemos nosotros, ¿quién la defenderá? Yo solo les digo que cuando los de abajo nos movemos los de arriba se caen”, dijo Sonia a Radio Mundo Real.