Según informó la Comunidad Estudiantil No’j en su página web, el ataque dejó un saldo de varias personas heridas, y una de ellas habría sido hospitalizada por tener heridas de gravedad.

“Nos anduvieron buscando calle por calle hasta acorralarnos”, fue la declaración que efectuó luego del ataque Cornelio Subuyuj, vocero de la comunidad las Trojes I, según figura en la nota realizada por la Comunidad Estudiantil No’j.

La comunidad indígena le exige ahora al gobierno guatemalteco que haga lo necesario para detener la represión que se vive contra las Trojes I, que juzgue a los simpatizantes de la cementera que están realizando estas actividades hostiles y que se garantice la llegada del relator especial de las Naciones Unidas sobre la Situación de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales de los Pueblos Indígenas, James Anaya, a San Juan Sacatepéquez.

De hecho, se presume que el ataque fue un intento de sabotaje a la visita del relator, cuya llegada a San Juan Sacatepéquez está programada para el próximo 15 de junio.

Éste no fue el único ataque que sufrió Las Trojes I en estos días: el pasado miércoles, cincuenta trabajadores de la cementera secuestraron a tres camiones que la comunidad había contratado para transportar balastro que permitiera reparar la carretera que la conecta con San Juan Sacatepéquez, que había sido destruida por las fuertes lluvias causadas por la tormenta tropical Aghata.

Ya en ese momento, la comunidad había demandado la intervención de las instituciones de derechos humanos para evitar posibles conflictos, como el que ocurrió pocos días después.

Imagen: http://www.comunidadnoj.blogspot.com/